domingo, 26 de febrero de 2012

Una declaración para el siglo XXI

Hace unos días recibí un reenviado de esos que te llegan al azar sobre un proyecto de educación de los japoneses. Venía con el nombre de Nohemí Silva Duque a quien no conozco. El asunto es el siguiente: la lectura del contenido me hizo reflexionar sobre lo que realmente deberíamos hacer para que  nuestros estudiantes hoy cambien la perspectiva de sí mismos y de su educación. Parafraseando el contenido enunciado y complementando con mis reflexiones terminé por plantearle a mis estudiantes primero mis propios pensamientos y por último invitarlos a lees, y firmar si estaban de acuerdo  la siguiente declaración con el fin de empezarla a vivir en nuestra experiencia cotidiana. 


DECLARACIÓN DE UN JOVEN DEL SIGLO XXI

1.    Rindo  culto a la bandera pero recuerdo que existen cientos de países en el mundo que también tienen su bandera y son naciones soberanas

2.    Canto el himno pero quiero cantar un himno del mundo, que haga sentir orgullosos a todos los hombres por el solo hecho de ser humanos y existir en la tierra

3.    Me olvido de la gloria de los  héroes inventados por la historia para rendirle culto a los grandes científicos, literatos, pintores, escritores, investigadores, tecnólogos, filósofos y ecólogos que han hecho del mundo hoy un lugar más agradable para vivir

4.    ·Sé que mi país es bello pero no es superior a los demás países. Cada país tiene su riqueza, sus gentes y su cultura a la que respeto y valoro profundamente.

5.    Jamás iré a la guerra para defender los intereses económicos delos grupos de poder, disfrazados de “patriotismo”. Mi guerra será contra la ignorancia, la pereza, la desidia y la discriminación

6.    Entiendo  y aceptó que existen diferentes culturas. Todas tan importantes y valiosas como mi propia cultura.

7.    Comprendo que los  horizontes que me esperan no son locales, regionales nacionales o continentales sino globales. Nací aquí pero soy un ciudadano del universo. Viviré como un ser humano del siglo XXI.

8.    Hablaré varias lenguas y me apropiaré de los adelantos tecnológicos para construir nuevos horizontes con todos los jóvenes del mundo.

9.    Rechazaré todo machismo, todo dogmatismo, toda discriminación y todo maltrato verbal o físico contra cualquier ser vivo. No entraré en discusiones religiosas sin sentido eso lo dejo par los que no tienen nada que hacer.

10.  Me interés será  por el conocimiento, la ciencia, la defensa de los animales y el medio ambiente. Leeré más libros, escucharé más música y disfrutaré del campo y del aire libre.

11.  Mejoraré los hábitos alimenticios y de ejercicio físico para mantener mi cuerpo y mi mente sanos.

12.  No vendo mi conciencia y no me presto para sobornos, engaños, artimañas, encubrimientos e injusticias. Me declaro un librepensador, autónomo y tomo mis propias decisiones


Marco Castelblanco Pérez




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